Hoy no he tenido que madrugar, he pasado la mañana tranquilita en el piso y después he ido al museo.
Hace un calor horroroso, como el primer día que llegamos.
El museo es una casa antigua y muy bonita donde había vivido una familia adinerada y que tenían unas vistas a la playa envidiables (como la de todos los ricachones). Había muchos objetos antiguos y todo estaba muy bien conservado. A continuación de la casa estaban unas salas donde se recogían varias exposiciones de pinturas, esculturas, etc...
Después de almorzar y hacer una gran compra en el super, hemos quedado para dar una vuelta en la tarde noche y tomar algo por ahí, ir al pier más importante de aquí, y ver la movida tarde-nocturna de Bournemouth.
Aquí las marchas empiezan a las 6 - 7 de la tarde y acaban a las 3 de la mañana, como está mandao.
La noche nos pilló o más bien nosotros a ella
y tuvimos que adentrarnos en varios locales y beber y bailar, porque según nos cuentan por estos lares, ésto es toda un tradición a cumplir por los visitantes del lugar, jejejeje.
Y así fue, cómo a las 2.30 de la madrugada acabó el día 23 de 29 días en Bournemouth.
Besos
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