Domingo en Bournemoth

Después de dormir unas cuantas horas, que ya el cuerpo y la mente lo pedía a gritos, hoy me he levantado y he ido en busca del Town center y como era de esperar, hay una gran plaza y una gran calle peatonal llena de tiendas por doquier, para pasear, para comprar y cómo no, el grupo revelación del momento y del lugar.

Iglesia St Peter, llena de libros con partituras y oraciones para cantar.

Calle peatonal de Bournemouth

El grupo revelación

Después de estar tooooodo el día en busca de una gorra para poder soportar el sol cascador que estamos soportando estos días, de vuelta a la residencia con las manos vacías, y con los pies hinchados como un elefante. 

Debo admitir que la tecnología nos ha estado jugando una mala pasada en estos días, primero que si el móvil sin cobertura, la wifi que encuentro no me permite mandar wahtsapp aún, y además, el adaptador del enchufe que compré es de 1 amperio, es decir, que lo fundí según le enchufé el ordenador, así que a comprar otro, esta vez de 13 amperios. Ya hoy me dieron la contraseña y usuario para conectarme a internet y parece que ya puedo entrar con normalidad pero solo con el ordenador. Ahora sí que sí.

Y a dormir, aunque con muchos nervios por la incertidumbre de lo que me depara el día de mañana en la escuela, la prueba inicial, el grupo, el profe y todo lo demás, que no es poco.

Besos a todos