Otro día me he pegado la "juyona", no sé ni como se escribe esa palabra, pero ahí la dejo pa si la filóloga la ve la corrija, nos hemos ido a una cafetería a tomar un típico café Bournemouthniano, y a disfrutar de la sensación de libertad que te hace sentir saltarte por un día las normas.
Otro día, ya por la noche, en vista de que aquí no se puede ir uno a la cama hasta después de las 11.30 si no quieres que te salga una úlcera, pues nos hemos reunido en mi habitación a hacer tiempo acompañados de un refrigerio, jejejejej.
Esta semana tampoco he faltado a mi clase de salsa, pero el ambiente no ha estado tan divertido como la primera vez, pero aún así lo he disfrutado de lleno.
El viernes bajamos a despedir a un grupo de españoles que ya se volvían a casa, gracias a Dios, y hemos tomado un poco de sangría para celebrarlo e irnos a dormir.
Y con poco más que ésto se acaba aquí esta penúltima semana en Bournemouth, pero empieza el fin de semana, y parece que promete.
Muchos besos
Muchos besos
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